La sedación consciente asume que el paciente mantiene una "cierta conciencia" a lo largo de la intervención, a pesar de los sedantes administrado, en oposición a la analgesia neuroléptica o anestesia general que se establece en el nivel de respectivamente 1 y coma 2 en una escala de 4.
En la práctica, el paciente es más o menos aislada de la realidad y sin inhibiciones:
- La sedación llamado "consciente" calmar al paciente pero se mantiene al tanto de los acontecimientos vividos en el gabinete. Estos protocolos pueden ser realizadas por un dentista en el consultorio dental.
- Para la sedación llamado "semi consciente" por intra venosa tipo diazanalgésie el paciente no tiene conciencia de la realidad aunque se mantiene en un nivel de sedación que no exceda de sueño. Este tipo de sedación es muy adecuado para todos los actos de cirugía dental de la más simple a la oficina más compleja. Este protocolo no puede ser hecha por un cirujano dental, sino por un anestesiólogo en el consultorio médico dental
La sedación no tiene vocación de anestesia: La anestesia se obtiene con anestésicos locales. Un acto de cirugía bucal o dental es imposible con sólo una sedación consciente sin anestesia local.
- Sólo la analgesia neurolept- y la anestesia general que se encuentra en un nivel de coma 1 y 2, respectivamente, en una escala de 4, ofrece el silencio de dolor necesario para alcanzar actos sin anestesia local, con por lo general una pausa en la respiración que requiere intubación. Este protocolo no puede ser hecha por un cirujano dental, sino por un anestesiólogo intensivista sólo en un quirófano en clínica de cirugía general.
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